Botiquín de primeros auxilios
Porque hay que comerse la bronca cuando los grandes no pueden resolver sus problemas y los que pagan son los más pequeños, y llenarse de un botiquín lleno de mimos y comprensión. Porque es la vida misma, hay que llenarse de coraje cuando tus hijos están dejando de ser niños y tienen que enfrentarse a ella. Hay que tener coraje para intentar no ponerles la mochila de rencor que venimos acarreando por no poder hacernos cargo de nuestra propia vida. Cuando se están haciendo grandes y comienzan a enfrentarse a un mundo de adultos que no tiene rumbo claro, que culpa a otros por sus propias carencias, que no se anima a crecer, ¿cómo acompañarlos y enseñarles que el mundo de adultos es un buen lugar para estar? Sacar del botiquín la mayor cantidad de comprensión, empatía, una buena dosis de asentir a la tristeza y al dolor, dándoles su buen lugar para que nos ayuden a transitar mejor. Dos píldoras de aceptación, una para cada uno. Y la mayor cantidad de abrazos que puedan existir. Los ...